“yo fui escueto en las respuestas, profe” fue la expresión de un estudiante al entregar el examen que recién terminaba, a lo que el profesor contestó con mirada complaciente “no te preocupés que yo también seré escueto en la nota!!” siguiendo la conversación, el estudiante preocupado le replicó “pero yo supuse que no tendría problemas” ; “error” fue la cortante respuesta que recibió.
Cuantos hogares, trabajos, amistades se han perdido por “suponer” que hemos comunicado correctamente. No basta suponer que me han entendido hay que asegurarse que se ha comprendido el mensaje. Errores descomunales se han cometido por suponer reacciones.
Yo supuse que tú lo harías!, Yo supuse que tú lo traerías! , yo supuse que le había enseñado bien! y así tantas expresiones; a veces de molestia otras de desilusión y otras de frustración.
En algún lado oí o leí la frase: “la suposición es la madre de los errores”, cuanta razón se tiene en ese dicho, no supongas que por ser bueno irás al cielo pues sufrirás la consecuencia de ese error: La separación eterna de Dios.
“Porque no me avergüenzo del evangelio, pues es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree”(Romanos 1:16) y cual es el evangelio? “Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las escrituras y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las escrituras…” 1 Corintios 15: 3-4 ; todo por amor para perdonarnos para pasar la eternidad en la presencia de Dios. Piensa, actúa, cree…… NO supongas.