martes, 3 de febrero de 2009

POR SUS FRUTOS LOS CONOCERAN


En el día a día tenemos muchos desafíos que solventar pero no otro más común que el lidiar con personas difíciles, la Palabra nos advierte que “por los frutos nos conocerán” así es como conocemos a los demás por sus frutos, aunque el problema no está en el fruto……está en el árbol; depende de su ambiente, de lo que se ha alimentado lo que determina su esencia en el fruto.
Para tratar a las persona necesitamos lo que Dios nos instruye “con misericordia y verdad se corrige el pecado”, ha notado que en el par de padres hay uno que es más compasivo que otro, el uno impone reglas y disciplina y el otro comprensión y amor. Conozco una familia que tiene un hijo que inexplicablemente había bajado su rendimiento académico, el Padre trató el tema con limites, disciplina y horarios de estudio; el hijo le temía, sin embargo la Madre; trató de razonar con el muchacho y entenderlo, usó la misericordia y descubrió que el muchacho se había enamorado, igualmente impuso horarios, horas de visita, le hizo comprender que para todo había tiempo y ese no era el tiempo para noviazgos, apenas tiene diez años. La diferencia fue que no separó la misericordia de la verdad, de allí que el problema surge cuando separamos la misericordia de la verdad y por eso Dios es enfático en poner en orden las cosas, primero misericordia y luego verdad sin separarlas.
Conocer el árbol, de lo que se alimenta será el punto de partida que hará mejorar el fruto, al igual que una persona al descubrir sus debilidades habrá que cambiar hábitos, ser selectivo con lo que ve, lee y escucha con el tiempo su comportamiento será otro. Recordando que “Con misericordia y verdad se corrige el pecado”, dándoles ese regalo que es Dios, será como se alimenten de otra fuente.

lunes, 12 de enero de 2009


Cuando estamos abatidos, pasando por cualquier circunstancia que nos preocupa tendemos a pensar en formas extrañas, dejándonos que nuestra mente nos haga una mala jugada con pensamientos de frustración, desanimo y derrota; sin embargo, el tener un tiempo para acudir a Dios para encontrar paz sin molestos acontecimientos externos que te distraigan, es entonces que encontramos las bellezas de pasar tiempo a solas con Dios.
Una experiencia que desde hace poco más de dos meses he podido experimentar con regularidad es apartarme a un lugar sólo, en especial me gusta un rincón en la montaña en los límites de la colonia donde actualmente vivo, llegar a ese lugar, sentarme y ver cada mañana lo bueno que es Dios es reconfortante.
Muchas veces esperando un versículo que le hable a mi corazón, otras solo viendo la naturaleza y recordar al Salmista cuando dijo y escribió en el Salmo 8 (biblia de lenguaje sencillo):
3 Cuando contemplo el cielo,
y la luna y las estrellas
que tú mismo hiciste
4 no puedo menos que pensar:
"¿Qué somos los mortales
para que pienses en nosotros
y nos tomes en cuenta?"
5 ¡Nos creaste casi igual a ti!
Nos trataste como a reyes;
6 nos diste plena autoridad
sobre todo lo que hiciste;
nos diste dominio
sobre toda tu creación:
7 sobre ovejas y vacas,
sobre animales salvajes,
8 sobre aves y peces,
¡sobre todo lo que se mueve
en lo profundo del mar!
9 Nuestro Dios y nuestro rey,
¡qué grande eres
en toda la tierra!
Al experimentar cuan Grande es Dios no hay más que confiar en Él como nuestro Dios amoroso.
Slds.

lunes, 5 de enero de 2009

Propósito para el 2009



A lo largo de mi caminar en el Cristianismo me he percatado que Dios nos lleva de Gloria en Gloria (como lo dice su Palabra) nos ayuda a pasar por las pruebas de cualquier índole que se imagine, económicas, laborales, relacionales, en fin de toda clase. Pero he aprendido a estar contento con lo que tengo, a ver con fe; “puestos los ojos en Jesús” Hebreos 12:2
En Hebreos 13:5 dice “……..contentos con lo tenéis ahora, porqué Él dijo: no te desampararé, ni te dejaré” esperar en paciencia los milagros de Dios requiere fe, haciendo por supuesto la parte que nos corresponde, esto es; tener comunión con Dios a través de mi devocional diario, enfatizó diario; tratar en la medida de lo posible de ser de buen ejemplo a mi familia, arreglar el mal entendido con el prójimo, pedir perdón a quién hemos ofendido, dar a otros de lo que Dios me da, dar a Dios lo que es de Dios en las finanzas, y podría seguir enumerando, pero eso es posible porque debo estar contento con Dios, tener esa relación fresca no histórica (es decir; si me preguntan que me ha enseñado Dios, no citar el verso que leí hace una semana sino lo que me ha enseñado HOY) tal y como a cada momento nos lo recuerdan en las conferencias dominicales.
El resultado de lo anterior te da paz, esa paz que sólo en Jesús puedes encontrar al saber que Dios ha de cumplir sus promesas.. ”Deléitate así mismo en Jehová y Él te concederá las peticiones de tu corazón” fíjese en el orden de este consejo bíblico; una realidad que en mi vida he podido ver y que ahora con los propósitos del nuevo año deberán ser prioridad.
Slds.